GONZÁLEZ ORDOVÁS, MARÍA JOSÉ
¿Ha de adaptarse la democracia y con ella el Derecho a cuantos cambios le vengan dados por el homo numericus y la nueva conciencia colectiva producto de la globalización? ¿Incluso en el caso de que tales transformaciones degraden a la democracia misma? ¿Ha de haber reglas de oro intangibles? ¿Puede haberlas? La democracia liberal atraviesa un proceso de desintegración agravado por diversos factores. Entre ellos destaca la bulimia normativa generadora de una inflación legislativa o una cierta forma de concebir el Derecho y ejercer los derechos y libertades entendidos como herramientas al servicio del bienestar individual, prescindiendo de cualesquiera consideraciones sociales que lo alejen de esa función instrumental. En ese contexto corremos el riesgo de que una concepción solipsista de los derechos, ajena a su función y componente social e intergeneracional, conduzca a la inmovilización de algunos sectores del Derecho y derive en que la democracia sea percibida como una carga. Así las cosas, el viejo contrato social se halla bajo la lupa.