HORCAJO,XAVIER
Desde hace 33 años, primero con los Gobiernos
de Jordi Pujol, que llegó a ser el jefe de gobierno
más longevo de toda Europa; luego los años
de oposición con el Tripartito en el Gobierno y
después con la reinstauración de Convergència i
Unió en el poder y Artur Mas en la Presidencia,
se han caracterizado por innumerables casos de
corrupción arreglados de forma política.
A veces con apaños en los juzgados, en las fiscalías generales
del Estado, a veces con indultos graciosos de los
culpables condenados, a veces comprando sentencias y,
las más, con apaños políticos para que los pillados que
son muchos salieran indemnes. La bandera catalana
ha sido el refugio de conductas indignas. Las comisiones
depredan la actividad económica de Cataluña y generan
unas maneras de hacer negocios que devalúan el futuro
de los catalanes.
Con los años, la sensación de impunidad viajaba en los
coches de consejeros y altos cargos de la Generalitat nacionalista,
hasta que con la crisis, llegó el hartazgo de los
ciudadanos por lo corrupto y por los corruptos. Y con él la
amenaza de volar por los aires ese ambiente de coimas,
dinero en paraísos fiscales, financiación inconfesable y
parasitismo que preside la economía de Cataluña.
Este ensayo describe cómo el entorno de Jordi Pujol, el
carismático líder nacionalista, siempre hizo negocios al
amparo de la administración que dirigía. Sus hijos son
multimillonarios, sin que puedan explicar a qué deben su
fortuna, más allá de la sombra del propio Pujol.