GARCÍA PÉREZ, RAFAEL
La marca, en sus orígenes, era un signo gráfico o denominativo que el fabricante aplicaba a sus productos para indicar que procedían de su fábrica. Hoy en día, la marca puede estar constituida, en expresivas palabras del Tribunal Supremo norteamericano, por "casi cualquier cosa que pueda portar un significado", y ha experimentado una explosión en las funciones que desempeña. La marca ya no es simplemente, en efecto, un signo de indicación de la procedencia empresarial. La marca ha pasado a constituir un signo de comunicación en el mercado, un canal de comunicación entre los empresarios y los consumidores, que despliega un variado conjunto de funciones que el ordenamiento jurídico se encarga de tutelar en mayor o menor medida. La presente monografía aborda esa progresiva expansión del derecho de marca y expone una concepción de la marca actual y moderna.